jueves, 16 de mayo de 2013

PODOLOGÍA Y BALONCESTO


La podología es la disciplina médico-sanitaria que tiene como finalidad el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de los pies.
Para ello utiliza diferentes tratamientos tanto conservadores como quirúrgicos. Una de las especialidades podológicas es la podología deportiva, cuyo fin es diagnosticar, tratar y prevenir las lesiones deportivas del pie y tobillo y también lesiones a distancia en la extremidad inferior intentando devolver al deportista a realizar su actividad física lo antes posible.
Es importante en cualquier actividad deportiva contar con un equipo sanitario multidisciplinar, encabezado por el médico deportivo que dirige el grupo, el fisioterapeuta y el podólogo.
En el baloncesto los pies y miembros inferiores cuentan con una participación intensa en todas las fases del juego, ya que el jugador de baloncesto los utiliza tanto para desplazarse a lo largo de la pista como para driblar o fintar a los jugadores contrarios como para elevarse hacia la canasta o caer una vez producido el tiro.
Así pues el pie y el baloncesto están firmemente unidos desde sus comienzos, al haber colocado su creador la canasta a 3,05 metros del suelo, la mejor manera de introducir la pelota en ella es saltar sobre los miembros inferiores cuya base es el pie.


El podólogo trata lesiones dérmicas y ungueales; helomas (callosidades), uñas encarnadas, papilomas víricos (verrugas), dermatomicosis (hongos en la piel) etc. Lesiones derivadas de un mal apoyo en la marcha, como por ejemplo pies pronados, producen fascitis plantares, periostitis tibiales, que se pueden resolver con tratamientos ortopodológicos (plantillas); pies cavos que provocan inestabilidad, y en definitiva cualquier patología cuyo origen sea un movimiento excesivo o determinado en una zona de nuestro pie en el momento de realizar nuestra actividad.

En fases de crecimiento de nuestros niños se producen molestias incrementadas por la actividad deportiva que se pueden disminuir y solucionar utilizando tratamiento ortopodológicos; dolores en los talones y en las rodillas son habituales en los jóvenes deportistas.
Para realizar los tratamientos ortopodológicos primero hemos de realizar un estudio biomecánico de la marcha en el que observamos y estudiamos como apoya el paciente. Hoy en día con las ultimas tecnologías analizamos sus gestos deportivos y de la información obtenida fabricamos, si es conveniente, unas plantillas a medida, totalmente personalizadas para nuestros deportistas y especializadas en su deporte, el baloncesto.