martes, 16 de abril de 2013

Tendinopatía Aquílea.


El tendón de Aquiles es el tendón más grueso y fuerte del cuerpo humano, aunque metafóricamente es signo de debilidad. Debe su nombre al principal héroe de la rendición de Troya, Aquiles, considerado por los griegos como un semidiós.
Desempeña un papel muy importante en la mayoría de los deportes y es particularmente vulnerable a la sobrecarga de la carrera y el salto reiterado y representa un 11% de las consultas por molestias en extremidades inferiores. El tendón de Aquiles forma un tendón distal articular para los músculos gemelos y sóleo, estos músculos se juntan y forman el músculo triceps sural .
El tríceps sural a su vez forma parte de un importante sistema muscular el sistema calcáneo – aquileo - plantar, junto con la fascia plantar. Como resultado de las cargas repetidas sobre el tendón puede producirse inflamación sobre el tendón o tejidos circundantes. La tendinitis aguda se produce con frecuencia en deportistas ocasionales poco entrenados. Entre los factores causantes el más común es la sobresolicitación del tendón, alteraciones de la estática del pie (pronación excesiva, pie cavo varo de antepie), falta de flexibilidad en el triceps con limitación de la flexión dorsal de la articulación del tobillo y también defectos en el calzado.
Una vez pasado el momento agudo de la lesión, unos 10 días, la tendinitis pasa a ser tendinosis, observándose signos de degeneración tendinosa.
El diagnóstico es básicamente clínico, dolor local e inflamación entre 3 y 6 cm de su inserción (zona menos vascularizada del tendón), aumenta el dolor a la flexión plantar si aplicamos resistencia.


El tratamiento aconsejado es flexibilizar la musculatura posterior y ayudar a desacargar el tendón con una talonera de 5mm de forma bilateral compensando también si existe alguna dificultad postural, reposo y reprogramación del tiempo de entrenamiento.
El calzado deberá tener una buena amortiguación y una especie de V en la zona posterosuperior del contrafuerte que le deje libre de presión y de microtraumatismos al tendón.
Los deportistas que experimentan roturas del tendón de Aquiles con mayor frecuencia son quienes participan en deportes con balón que requieren cambios rápidos de dirección. A veces el paciente con rotura del tendón tiene antecedentes de dolor de larga duración localizado en el tendón, aunque la lesión suele producirse sin aviso. Estas roturas se producen generalmente por cambios degenerativos en el tendón (tendinosis) en su zona de menos vascularización antes comentada. Las roturas del tendón pueden ser parciales o totales. Las primeras a menudo se producen en deportistas previamente activos (cerca o en la 4ª década de vida) que reanudan la actividad deportiva. La actividad física regular ayuda a prevenir esos cambios degenerativos. En la mayoría de los casos el mecanismo de lesión radica en la activación fuerte de la musculatura posterior de la pierna, por ejemplo un impulso fuerte con el pie que sostiene el peso corporal mientras la rodilla esta extendida.